Pianos que han hecho historia: una mirada a los modelos icónicos del siglo XX

Durante el siglo XX, el piano vivió una etapa de expansión, refinamiento técnico y consagración cultural sin precedentes. No sólo fue protagonista en salas de concierto, estudios de grabación y conservatorios, sino también en hogares y en el cine. Detrás de cada gran intérprete, de cada grabación histórica o de cada interpretación memorable, había un instrumento con identidad propia.

En este artículo hacemos un recorrido por algunos de los modelos más influyentes del siglo XX: pianos que marcaron una época por su sonoridad, innovación, presencia escénica o asociación con artistas legendarios.

Steinway & Sons Model D (Hamburg-NY)

Década de referencia: Desde 1900 hasta hoy

Considerado por muchos como el piano de concierto por excelencia, el Model D de Steinway & Sons ha sido, durante más de un siglo, el estándar en auditorios de todo el mundo. Su potencia sonora, riqueza armónica y fiabilidad lo han convertido en el compañero inseparable de pianistas como Vladimir Horowitz, Martha Argerich o Daniil Trifonov.

Con sus 274 cm de largo, este piano de cola ofrece una gama dinámica incomparable, un tacto extremadamente refinado y una estructura pensada para soportar décadas de uso intensivo. Su papel ha sido tan relevante que muchos concursos y festivales internacionales lo adoptaron como instrumento oficial durante gran parte del siglo XX.

Bösendorfer Imperial 290 (Austria)

Década de referencia: Desde 1910

Con sus 97 teclas y su icónica sonoridad cálida y envolvente, el Imperial 290 de Bösendorfer es único en el mundo del piano. Este modelo, que añade 9 notas graves más allá del estándar (llegando al do subcontrabajo), fue diseñado a petición de compositores como Busoni, que soñaban con una extensión sonora aún mayor.

Ideal para repertorios de música romántica, tardo-romántica o para interpretaciones de Mahler o Rachmaninov, este piano se convirtió en símbolo del lujo vienés y la excelencia artesanal. Ha sido elegido por intérpretes como András Schiff y ha ocupado un lugar especial en grabaciones históricas.

Bechstein Model C (Alemania)

Década de referencia: 1930–1950

Los pianos Bechstein, y especialmente el Model C, fueron referencia absoluta durante la primera mitad del siglo XX en Europa. Su presencia era habitual en estudios de grabación, salas de música de cámara y grandes residencias culturales.

Con un timbre refinado, equilibrado y muy expresivo, el Model C fue el preferido por artistas como Wilhelm Kempff. Su calidad sonora y estabilidad lo posicionaron como uno de los modelos más buscados antes y después de la Segunda Guerra Mundial.

Yamaha CFIIIS (Japón)

Década de referencia: 1980–1990

A partir de los años 80, Yamaha consolidó su posición en el panorama internacional con el CFIIIS, un piano de concierto de 275 cm de largo. Con una proyección sonora impresionante y una respuesta ágil, fue rápidamente adoptado en concursos internacionales y conservatorios.

Pianistas como Sviatoslav Richter, Krystian Zimerman o Michel Béroff lo eligieron para interpretaciones modernas y repertorios exigentes. Su combinación de potencia, claridad y tecnología de fabricación de alta precisión lo convirtió en una alternativa sólida a los modelos europeos más tradicionales.

Fazioli F308 (Italia)

Década de referencia: Desde 1980

Aunque más reciente, el Fazioli F308 merece un lugar en este recorrido histórico. Con 308 cm de longitud, es el piano de cola más largo producido en serie. Su capacidad de proyección, profundidad tímbrica y precisión técnica lo han hecho destacar rápidamente entre profesionales exigentes.

Artistas como Herbie Hancock, Angela Hewitt o Arcadi Volodos lo han adoptado para sus grabaciones. Representa la síntesis perfecta entre tradición artesanal e innovación acústica.

Pleyel (Francia)

Década de referencia: principios de siglo XX (modelos restaurados)

Aunque la fábrica Pleyel cesó su actividad a mediados del siglo XX, sus modelos antiguos han vivido un renacimiento gracias al auge de la interpretación históricamente informada. Asociados a la figura de Frédéric Chopin, estos instrumentos ofrecen una sonoridad delicada, íntima y lírica, muy distinta de la potencia de los pianos modernos.

Actualmente, varios centros de música antigua y pianistas especializados en repertorio romántico los utilizan en conciertos y grabaciones con criterios originales.

Cada uno de estos modelos representa mucho más que un conjunto de cuerdas y martillos: son expresiones de una época, de una estética, de una manera de entender el arte pianístico. A través de ellos, se han contado historias, se han vivido revoluciones sonoras y se ha emocionado a millones de oyentes.En Jorquera Pianos, comprendemos la importancia de preservar esta memoria viva. Por eso, tanto en nuestra selección como en nuestros servicios de restauración, cuidamos cada instrumento como parte de una herencia que sigue resonando en el presente.

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